Venezuela tiene una votación clave. Esto es lo que hay que saber
Este domingo, se espera que un millón de venezolanos acudan a las urnas para elegir a un candidato de la oposición que se enfrente al presidente Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales de 2024, una votación que podría ser crucial para el destino de un país que ha sufrido una década de crisis económica y autoritarismo gubernamental.
Maduro llegó al poder en 2013 tras la muerte de Hugo Chávez, el fundador de la revolución inspirada en el socialismo que gobierna el país. Bajo la gestión de Maduro, Venezuela, que solía ser uno de los países más ricos de América Latina, ha sufrido un extraordinario colapso económico, lo que generó una crisis humanitaria que ha hecho que más de siete millones de personas huyan del país.
Pero el martes, el gobierno de Maduro y la oposición firmaron un acuerdo diseñado para avanzar hacia unas elecciones libres y justas, lo que incluye permitirle a la oposición elegir un candidato para las elecciones presidenciales del próximo año.
Sin embargo, las elecciones del domingo se realizarán sin apoyo gubernamental oficial. En su lugar, el proceso está siendo organizado por la sociedad civil, que instalará centros de votación en casas, parques y en las sedes de los partidos de oposición.
La candidata que lidera las encuestas es María Corina Machado, una exdiputada de centroderecha, quien se ha autoproclamado como la mejor oportunidad del país hasta el momento para derrocar al gobierno de inspiración socialista que ha tenido el control del país desde 1999.
A continuación, presentamos lo que hay que saber sobre las elecciones del domingo:
¿Cómo están las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos?
Durante años, Estados Unidos ha venido implementando sanciones a algunos líderes venezolanos, pero el gobierno de Donald Trump las endureció de forma significativa en 2019, tras unas elecciones que fueron ampliamente percibidas como fraudulentas, en las que Maduro se declaró ganador.
Desde hace tiempo, Maduro ha buscado el levantamiento de las sanciones que han asfixiado la economía, mientras que Estados Unidos y sus aliados en la oposición venezolana han querido que Maduro permita unas elecciones competitivas que pueda brindarles a sus rivales políticos una oportunidad legítima de ganar.
La semana pasada se produjo el acercamiento más significativo de las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos en años.
El gobierno autoritario de Venezuela acordó aceptar a los migrantes venezolanos deportados desde Estados Unidos, firmó un acuerdo con los líderes de la oposición diseñado para avanzar hacia unas elecciones presidenciales libres y justas, y liberó a cinco presos políticos.
A cambio, Estados Unidos acordó levantar algunas sanciones económicas impuestas a la industria petrolera de Venezuela, una vital fuente de ingresos para el gobierno de Maduro.
¿Qué efecto tiene la flexibilización de las sanciones?
El levantamiento de las sanciones anunciado esta semana le permite a la compañía petrolera estatal venezolana exportar petróleo y gas a Estados Unidos durante seis meses. Durante los últimos años, el gobierno venezolano había estado exportando petróleo a China y otros países con un descuento significativo.
Si bien se espera que la medida sea de gran ayuda para las finanzas públicas de Venezuela, los analistas afirmaron que la infraestructura deficiente y la renuencia de algunos inversores externos a ingresar rápidamente al mercado venezolano presentan desafíos importantes.
¿Qué impulsa estos avances?
Entre los factores que impulsan esta oleada de nuevas políticas se encuentra el incremento de la importancia geopolítica de Venezuela.
El país sudamericano tiene las mayores reservas comprobadas de petróleo del mundo, y existe un creciente interés de Estados Unidos en esas reservas en medio de la preocupación por un conflicto más amplio en el Medio Oriente y la guerra en Ucrania, las cuales han amenazado el acceso a los suministros mundiales de petróleo.
Aunque se necesitarán años para que la mermada infraestructura de la industria petrolera de Venezuela se recupere, las reservas de petróleo del país podrían ser cruciales en el futuro.
El gobierno de Biden también está cada vez más interesado en mejorar la situación económica en Venezuela para intentar mitigar el flujo de migrantes venezolanos que intentan cruzar a Estados Unidos.
¿Podrían estas elecciones realmente conducir a un cambio en el liderazgo de Venezuela?
Los expertos se muestran escépticos ante la posibilidad de que Maduro renuncie al poder de forma voluntaria, o de que permita que se celebren elecciones si existe la posibilidad de que no las gane.
Su gobierno está siendo investigado por la Corte Penal Internacional por posibles crímenes de lesa humanidad, y Estados Unidos ha fijado una recompensa de 15 millones de dólares por su arresto para enfrentar cargos de tráfico de drogas. Abandonar la presidencia podría traducirse en largas condenas de cárcel para Maduro y sus asociados.
Así que a pesar de la relevancia de los anuncios recientes, a algunos analistas les preocupa que Maduro esté jugando tanto con la oposición como con el gobierno de Estados Unidos, y que pueda al final terminar con todo lo que busca: flexibilización de las sanciones; al menos cierto reconocimiento internacional por su disposición hacia elecciones justas; y una victoria el año que viene que le permita retener el poder.
Estados Unidos ha intentado prevenir que suceda eso dejando bien en claro que las sanciones pueden ser restituidas en cualquier momento.
Sin embargo, algunos analistas afirmaron que eso podría ser difícil si las compañías se aprovechan del levantamiento de las sanciones y comienzan a invertir en Venezuela. Si eso sucede, podría ser complicado volver a instaurar las sanciones.
¿Quién es María Corina Machado, la candidata líder?
Machado es una política veterana que tiene el apodo de “la dama de hierro” debido a su relación adversa con los gobiernos de Maduro y Chávez. Es percibida por algunos simpatizantes como una persona valiente por permanecer en el país cuando muchos otros políticos han huido para evadir la persecución política.
Sus propuestas de apertura al libre mercado y de reducir el rol del Estado le han hecho ganar una base leal de seguidores por diferentes clases sociales.
Pero durante la promoción de su candidatura, la campaña de Machado ha estado plagada de violencia y vigilancia gubernamental.
Machado ha sido golpeada por personas que portaban carteles de Maduro y en un mitin en el que estuvo presente The New York Times le arrojaron sangre de animal. Ha sido seguida por la policía de inteligencia militar y suele sortear los controles policiales viajando en las motocicletas de sus simpatizantes.
¿Podría Machado realmente ganar la presidencia?
Las encuestas sugieren que Machado probablemente ganará las primarias, la cual tiene un total de 10 candidatos.
El grupo de contendientes, los cuales representan una gama de diversas visiones ideológicas, incluye exgobernadores, activistas, profesores y abogados, aunque ninguno parece haber logrado avances suficientes como para representar una amenaza seria para Machado.
Sin embargo, la pregunta más importante es si Machado, asumiendo que gane el domingo, será capaz de participar en las elecciones presidenciales de 2024.
El gobierno de Maduro le ha prohibido a Machado postularse a la presidencia por 15 años, alegando que no completó su declaración de activos e ingresos cuando fue diputada. Este tipo de inhabilitaciones son una táctica común utilizada por Maduro para mantener a competidores fuertes fuera de las boletas de votación.
A pesar de un acuerdo esta semana para avanzar hacia condiciones electorales competitivas, el gobierno de Maduro ha mostrado pocas señales de que permitirá que Machado se postule.
El gobierno de Biden ha dejado claro que espera que Maduro restituya a los candidatos inhabilitados o se enfrente al restablecimiento de las sanciones.
Si a Machado no le permiten postularse a la presidencia en 2024, la oposición podría presentar a otro candidato. Pero no se sabe con certeza si Machado saldría del proceso voluntariamente, si la oposición apoyaría a un solo nuevo candidato o si dividiría el apoyo, lo que en esencia le entregaría a Maduro las elecciones en bandeja de plata.